Letras desde Bujumbura (Burundi)
La vida por Bujumbura continúa sin demasiados sobresaltos. Aún sigue habiendo ciertos problemas de estabilidad en el país pero, por el momento, no hay enfrentamientos armados, lo cual aquí ya es una buena noticia.
Últimamente estoy viajando algo más que antes, visitando proyectos e identificando nuevas necesidades. El último viaje ha sido a la zona de Nord Kivu, la provincia más nororiental del Congo. Uno de los principales motivos que me impulsan a escribir estas líneas es contaros lo que está pasando allí.
Nord Kivu es actualmente es uno de los dos o tres peores lugares en toda África. La situación es muy complicada, con muchos actores implicados en el conflicto: en primer lugar, el Ejército congolés -reunificado después de las elecciones democráticas de 2005, pero que aún mantiene un grado nulo de respeto por los derechos humanos-. Por otro lado, el FDLR, formado por los llamados Iterhamwe (ruandeses hutus que escaparon de su país en el 94 después del genocidio y que están acusados de haber participado activamente en el exterminio). Además están las tropas leales al general Nkunda, compuestas por tropas tutsis y que, según fuentes independientes, cuentan con apoyo armamentístico y de suministro por parte de los países vecinos.
Las tropas de Nkunda no aceptan integrarse en el Ejército congolés, exigen el desarme del FLDR y la repatriación de todos sus miembros a Ruanda y, además, tienen ciertas ansias soberanistas en la zona. Por último están los May-May, ejércitos de defensa popular, surgidos en los 90 contra la invasión de tropas extranjeras en la zona. Los May-May tampoco se han integrado aún en el ejército, no aceptan la autoridad gubernamental y luchan por cuenta propia. Están instalados en Nord Kivu y combaten a las tropas del general Nkunda.
Es un mosaico difícil de comprender en el que ninguna facción se fía de otra. Imaginaros lo difícil que es buscar soluciones pacíficas entre dos armadas, cuanto más si hay cuatro que se disparan constantemente unos a otros...
El resultado de esto es que, cuando hace 10 días pasé por Goma, capital de Nord Kivu, la imagen fue una de las más impactantes que he visto desde que estoy por aquí. La ciudad está llena de gente que llega huyendo de la guerra. En los alrededores de la capital hay cuatro campos de desplazados, con unas 50.000 personas a día de hoy. En toda la provincia 800.000 personas han huido de sus casas. Allí la vida, como os podéis imaginar, es durísima; gente hacinada, familias viviendo en cabañas improvisadas con ramas y palos, de 2 metros cuadrados, sin techo y en época de lluvias. Al menos el ACNUR está tomando medidas de forma bastante eficiente y está consiguiendo depósitos de agua potable, letrinas y dispensarios temporales en los campos.
Esta vez Naciones Unidas se está moviendo rápido. También os envío algunas fotos de uno de los campos de desplazados en los alrededores de Goma. No era fácil hacerlas pues en esta zona de conflicto está prohibido sacar fotos salvo permiso expreso, y la zona estaba llena de militares, pero al menos creo que os servirán para haceros una idea. Lo más impactante de todo no son las imágenes, sino la cantidad de gente en esta situación. El equivalente al doble de la población de Valladolid vive ahora mismo en estas condiciones. Los cuatro ejércitos campean a sus anchas en la provincia, hay decenas de muertos cada jornada y, según la ONU, mil mujeres son violadas cada día en la zona. ¿Os podéis hacer una idea?
Me sentía en la obligación de contaros esto porque creo que en los medios de comunicación en España no se le está dando demasiada importancia y esto está pasando aquí y ahora mismo...
Un fuerte abrazo a todos.
Alberto